Lipoescultura

Técnica quirúrgica cuyo objetivo es remover los depósitos de grasa rebelde  que no disminuyen con dieta ni ejercicios. Estos cúmulos se encuentran con mayor frecuencia en el abdomen, muslos, caderas, glúteos, rodillas, brazos y pantorrillas.

También pueden aparecer en el rostro y cuello, y en la región mamaria en el caso de los hombres (pseudo ginecomastia).

Este procedimiento puede efectuarse solo o en complemento con otras cirugías como abdominoplastía, mamoplastía de aumento u otras.

lipoescultura

El candidato ideal para esta intervención es un paciente sano con piel firme y elástica que tiene adiposidades localizadas en algunas zonas del cuerpo.

Es importante que tenga expectativas realistas sobre lo que esta operación le puede brindar, pues la lipoescultura mejora notablemente la apariencia y modela el contorno corporal, pero no logra la perfección ni la semejanza a un ideal imaginario.

Esta técnica no sirve para bajar de peso y es solo un complemento más del tratamiento para los pacientes obesos que deben seguir un régimen alimentario y actividad física regular.

Es un procedimiento seguro pero conlleva riesgos como toda cirugía, en especial en pacientes con enfermedades crónicas, es por esto que debe ser evaluado por su cirujano en la primera consulta, para decidir la conducta a seguir y minimizar los riesgos. Las complicaciones posibles son: Infección y sangramiento, cambios de la sensibilidad cutánea, irregularidades en la piel, cicatrización en exceso de la piel y/o pérdida de la piel, este último muy infrecuente, asimetría del abdomen, reacciones alérgicas, formación de seromas, complicaciones pulmonares, síndrome de embolismo graso. A  largo plazo pueden producirse alteraciones del contorno corporal y muy infrecuentemente dolor crónico.

El embarazo, la lactancia y las alteraciones de peso provocan cambio en los resultados de una cirugía de contorno corporal.

Esta cirugía consiste en la introducción -a través de pequeñas incisiones de menos de 1 cm. en la piel de las áreas a tratar- de delgadas cánulas conectadas a una máquina de succión para extraer la grasa acumulada. Se complementa en la mayoría de los casos con la aplicación de Ultrasonido VaserMR. (www.vaserchile.cl)

 

La duración del procedimiento varía según las características de cada paciente, pero en términos generales se extiende alrededor de tres a cuatro horas en pabellón. Si la región a tratar es pequeña el procedimiento puede ser mucho más rápido, como es el caso del rostro o la papada (submentón).

Dependiendo de la extensión que tenga la operación, la anestesia puede ser desde local hasta general. La lipoescultura tumescente reduce los requerimientos de anestesia, ya que inyecta un fluido anestésico en las áreas que serán lipoaspiradas, disminuyendo notoriamente el sangramiento y dolor posterior.

En la consulta con el especialista serán discutidas las áreas del cuerpo que desea modelar y se evaluará su concentración adiposa, elasticidad de la piel e historial clínico. En esta oportunidad, se le indicara si es necesario agregar un procedimiento complementario para lograr el objetivo que usted busca.

Además, le detallaremos los pasos que debe seguir para prepararse para su operación.

Dentro de las medidas generales, deberá dejar de fumar 2 semanas antes  y suspender los medicamentos que interfieran en la coagulación de su sangre y los anticonceptivos.

El día en que será operada debe ir a la clínica en ayunas desde la noche anterior, con ropa cómoda, sin joyas ni artículos de valor y sin maquillaje ni barniz de uñas.

Si, en la mayoría de los casos durante 24 horas, para controlar la evolución inmediata mediante exámenes y observación clínica.

Durante la hospitalización al paciente se le administran los medicamentos necesarios para hacer más confortable esta etapa, se le indicará detalladamente previo al alta, todas las medidas a seguir en su domicilio y debe estar acompañado de un adulto durante las primeras 24 horas del alta.

Desde la clínica se irá con ropa elástica especial que deberá utilizar aproximadamente 1 mes y medio, dependiendo de su caso particular y según la evaluación de su médico.

Es normal que, por la gran cantidad de fluidos que se le administraron durante su cirugía, elimine líquido color rojo por las heridas operatorias y que moje parte de sus apósitos (parches).

 

También, deberá asistir a las terapias post operatorias y controles médicos, en los cuales además de cuidar sus heridas y vigilar las posibles complicaciones, se le aplicará diferentes tratamientos por kinesiólogas especializadas para optimizar los resultados.

En general  usted  requerirá de un par de días (dependiendo de la extensión de su cirugía) para volver progresivamente a realizar sus actividades cotidianas. Caminará y estará levantado desde el primer día.

Las molestias y el dolor serán tratados con medicamentos durante los 10 primeros días, y a las 72 horas de su cirugía aproximadamente, iniciará las sesiones de drenaje linfático con nuestros kinesiólogos para favorecer la desaparición gradual de la hinchazón e inflamación.

El reinicio de la actividad física dependerá caso a caso, pero habitualmente se reintegran al mes de la operación.

Las dos primeras semanas notará una gran inflamación y edema en las zonas operadas, que disminuirá progresivamente hasta percibir los resultados parciales a los 30 días de su cirugía. La cicatrización es un proceso paulatino y por esto su figura final será evidente dentro de los tres primeros meses post operatorios.

Es normal la aparición de equimosis (moretones) en las áreas tratadas que van desapareciendo en el transcurso de los primeros 15 días.

Usted progresivamente notará la diferencia en su aspecto, sentirá su ropa holgada y su cuerpo más cómodo.

Es recomendable mantener una dieta balanceada  y una rutina de ejercicios regular para conservar su nueva figura dentro de los años venideros.